nueva dirección

Último post, sólo para decir: "no está muerto quien pelea".
Qué mejor despedida para un blog inspirado en El Club de la Pelea.

(Aclaro por si queda como que me fui "por el comentario a mi post de los limericks": no, los hubo mucho peores, lo que pasa es que los borré).
No he muerto: sólo tengo un nuevo nombre artístico. Tras el descanso, aproveché todos los yeites que me mandaron mis amigos y aprendí a postear fotos, a crear enlaces externos que se abren en una ventana, incluso a personalizar la plantilla. Esto último no dio resultados extraordinarios, pero sí aceptables.
Espero.
Mi nuevo blog es distinto. Más chiquito, menos pretencioso, con más enlaces, sin los comentarios que le daban vida al rosarinosaurio Norton y por los cuales murió, o se dejó morir, cual saurio tras la glaciación o el cometa.
Esto fue una retirada estratégica. No volveré aquí; pero quedan los archivos.
Los Dres. Durden & Norton agradecen el aliento de sus lectores amigos.

Como dijo el poeta:
"Habremos sido una conversación".

Suicide blog

Ahora sí. Nos vamos de una vez.
Este blog hoy cumple un año mercurial (tres meses exactos) y os dice adiós.

Pensé que la gente que conocería por Internet sería interesante y alguna sí lo es. Pero estos pocos contactos felices (pocos, pero buenos) navegan frágilmente sobre un mar de prejuicios donde escasea el sentido del humor.
Para decirlo con un lenguaje New Age, conocer la breve obra de desconocidos que postean anónimos de mierda (Imparcial: ¿qué apellido es ese?) levanta la autoestima porque uno sale ganando en la comparación; pero también cansa encontrarse siempre con los mismos prejuicios del imaginario social de un país construido sobre la opresión y el espanto. Personalmente opino que ni la vanidad, ni la búsqueda de gloria, ni la pretensión de ser intelectual, ni mucho menos la pretensión de dejar de serlo y permitirse el disparate (¡viva Edward Lear aunque yo perezca!), sean pecados. Pero esta breve e instructiva navegación por las cloacas mentales de mi cultura me reveló la existencia de infiernos de odio y prejuicio a los que no tengo ganas de seguir prestándoles espacio alguno en la ventana de comentarios de esta bitácora. Tampoco tengo ganas de desactivar la ventana de comentarios, porque justamente la gracia de postear era el feedback; para publicar sin feedback, prefiero hacerlo en cualquier otro medio donde no tenga que pagar la conexión.
Por supuesto que no todo fue infernal y también encontré excelentes amigos. Con ustedes, mis amigos, seguiremos en contacto a través de otros medios.

Amigos: gracias, felices fiestas y un próspero 2005 para todos.

Limericks criollos

Un juez en el juzgado de Aranjuez
quiso meterse adentro de una nuez;
lo habrá logrado, pues
nadie lo vio después
al juez en su juzgado de Aranjuez.


Existió cierto perito en Arroyito
que se creía todo un pajarito;
un día entró un perrito
y voló dando gritos
aquel notable perito de Arroyito.


Cuentan de una bailarina en China
que tenía la cintura tan, tan fina
que se lanzó a una tina
y cayó en Argentina,
aquella astuta bailarina china.

Sad Xmas song

I never thought you'd grow up to despise me,
not as long as I held and I cared.
Now you live on your own with your TV and bicycle
and on top of the world you roll, feeling great.
But you don't know you're strong,
you don't know you're young
because you don't know what it's like to be old, yet.

Well, my days they are longer now,
but I don't have too many summers left
and as far as I know there is not such a thing
as a future, not even for you.
But I can't give you the bad news
for you're so far away,
so deeply lost in your dreams as I used to.

But when at last one day you come to realize
the real size of the world, I'm afraid
I won't be there to share, son,
I won't be there.


Lo de arriba debe ser uno de los poemas más tristes que se hayan escrito en inglés para esta época (después, mucho después de por supuesto el inigualable Aubade de Philip Larkin), ¡y acaba de ocurrírseme!
¿Alguien se anima a ponerle música?